Mérida, Yucatán, 17 de febrero de 2024. – Tras revelaciones de ecologistas sobre contaminación de cenotes con material de construcción, el Primer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa y de Trabajo del Décimo Cuarto Circuito de Mérida ha decidido detener temporalmente los trabajos en la sección 5 del proyecto del Tren Maya. La medida se mantendrá en vigor hasta que el Gobierno Federal (a través de Fonatur Tren Maya) presente evidencia de haber realizado estudios exhaustivos de geología, geofísica y geohidrología para evaluar posibles impactos en el subsuelo de la zona.
“Se concede la suspensión definitiva para paralizar temporalmente los trabajos del Tren Maya en la sección 5 Sur, hasta que se demuestre ante el Juzgado Primero de Distrito en Yucatán que se han llevado a cabo los estudios de geología, geofísica y geohidrología mencionados en las condiciones 9 y 10 de la autorización ambiental, y se compartan los resultados”.
El gobierno está obligado a presentar al juzgado registros detallados, informes de construcción y cualquier documentación relacionada con cuevas, cavernas y cenotes a lo largo de la ruta del tren, así como medidas de prevención para evitar la contaminación del agua subterránea y cualquier incidente ocurrido durante la ejecución de las obras.
Esta decisión revierte la negativa previa de suspensión definitiva emitida en agosto de 2022, en el caso de amparo 1003/2022, que consideraba que los estudios del gobierno cumplían con los requisitos de prevención y que la sección 5 del Tren Maya no representaba un riesgo para la estabilidad de los sistemas acuíferos locales.
La acción judicial sigue a denuncias recientes por parte de activistas ambientales del grupo Sélvame del Tren, quienes han reportado daños al sistema de cavernas en Quintana Roo y al acuífero maya debido a las perforaciones para la instalación de pilotes que sostendrán las vías del tren.
José Urbina, buzo y activista de Sélvame del Tren, ha mostrado pruebas de vertidos de cemento en los ríos subterráneos del acuífero maya, resultado de la construcción en la sección 5 sur del Tren Maya. Según sus estimaciones, podrían haberse vertido hasta 250 metros cúbicos de cemento en el acuífero.
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