El mundo del fútbol llora la pérdida de Andreas Brehme, el legendario exfutbolista alemán cuyo memorable penal aseguró la victoria para Alemania en la Copa Mundial de Italia 90. A la edad de 63 años, Brehme nos deja tras sufrir un fatal infarto en las primeras horas de este martes.
Su nombre siempre estará ligado al momento histórico en que, con un tiro desde el punto penal, desató la euforia alemana y la desesperación argentina en la final de aquel torneo. Aquel gol, envuelto en polémica por la ejecución del árbitro uruguayo-mexicano Edgardo Codesal, se convirtió en una página indeleble en la historia del fútbol.
Brehme, además de su destacada actuación con la selección nacional, dejó una huella imborrable en varios clubes de renombre, incluyendo Kaiserlautern, Bayern Múnich, Inter de Milán y Zaragoza.
Un momento curioso y nostálgico ocurrió en 2003, cuando Sergio Goycochea, el portero argentino derrotado por el penal de Brehme, revivió aquel instante en Alemania, solo para ser vencido nuevamente por el legendario jugador durante el medio tiempo de un partido entre Wolfsburgo y Bayern Múnich.
La partida de Brehme llega en un momento especialmente conmovedor, poco después del fallecimiento de Franz Beckenbauer, el mítico entrenador que guió a Alemania hacia la gloria en Italia 90.